lunes, 13 de enero de 2014

La luz de tu mirada


Es cada una de las sensaciones que despiertas en mi interior
lo que me mueve a perder la razón con cada palabra que sale de tu boca
con cada uno de los gestos que adorna tu rostro
y la manera en que haces que todo cobre sentido a mi alrededor
iluminando todos mis días con la luz de tu mirada.
Has conseguido levantar tan alto mi mundo poblado por fantasías
que me atemorizó al creer que mi sueño puede chocar contra la realidad
si acaso tu decidieras no darle una oportunidad a este corazón
que lo único que busca es procurar tu felicidad
pues tu sonrisa es lo único que llena mi vida.
Tiemblo cuando tus manos tienen un roce contra las mías
ansío el momento en el que nuestras pupilas se crucen
aunque sea durante el segundo más infímo
porque me basta tener un solo y diminuto recuerdo
de las cosas maravillosas que puedo contemplar con la luz de tu mirada.
Quiero andar por tu mismo camino y observar las cosas que tú ves
deseo que te des cuenta de la llama que has encendido en mis sentimientos
y llegar a conocer como se sienten tus labios contra los míos,
pues mi más grande anhelo se ha convertido en tu boca
que ha conseguido quitarme el aliento aún sin tener la certeza de su sabor.
Decir que te amo, es poco para describir lo que realmente siento
que va mucho más allá de cualquier cariño que haya podido profesar
eres la razón que justifica mi existencia, mis palabras y mis acciones
solo tú tienes el poder de hacerme vacilar y al mismo tiempo
enfrentarme al mundo con la luz de tu mirada.